El tiempo es dinero, y cuando hablamos de horas extras, la legislación en Colombia es clara: deben ser compensadas y respetadas bajo las normas establecidas en el Código Sustantivo del Trabajo. Pero, ¿qué implica realmente la política de horas extras? Aquí te lo explicamos de manera sencilla y directa.
¿Quién regula las horas extras en Colombia? El Ministerio del Trabajo es la entidad encargada de vigilar que las empresas cumplan con la normatividad laboral. Además, la Unidad de Gestión Pensional y Parafiscales (UGPP) supervisa el correcto pago de las contribuciones asociadas a estas horas adicionales.
¿A quién se deben reportar las horas extras? Las horas extras deben ser reportadas y aprobadas previamente por el empleador. Dependiendo de la organización, esta autorización puede gestionarse a través del jefe inmediato, el área de Talento Humano o mediante sistemas internos de control de tiempo. No reportarlas correctamente podría acarrear sanciones.
Administración de los incumplimientos El incumplimiento en el pago de horas extras es una falta grave. Si un trabajador labora más allá de su jornada sin la debida compensación, puede presentar una queja ante el Ministerio del Trabajo, lo que podría derivar en multas para la empresa. Asimismo, el no cumplimiento de los límites legales de horas extras también puede generar sanciones.
¿Las horas extras son salariales? El salario no solo incluye la remuneración ordinaria, fija o variable, sino también todo lo que el trabajador recibe en dinero o en especie como contraprestación directa por su labor. Esto abarca primas, sobresueldos, bonificaciones habituales, el pago por trabajo suplementario o en horas extras, la remuneración por laborar en días de descanso obligatorio, así como porcentajes sobre ventas y comisiones.
Manipulación en el registro de horas extras Es fundamental validar la asistencia real de los empleados en relación con el registro de horas extras. En algunos casos, los jefes pueden encontrar la manera de nivelar la compensación de un empleado asignando horas extras no trabajadas, con el fin de que el trabajador acepte una oferta salarial menor y sea contratado por la empresa. Esto puede generar serios inconvenientes y riesgos. • Fraude laboral: Se distorsiona la estructura salarial de la empresa y se incumplen las normas de contratación. • Sanciones legales: Si una auditoría descubre esta práctica, la empresa podría enfrentar multas y procesos judiciales. • Afectación en aportes a seguridad social: El mal registro de horas extras puede generar inconsistencias en los pagos a pensión y salud. • Pérdida de confianza y reputación: Un ambiente de trabajo con estas prácticas puede erosionar la credibilidad de la empresa y afectar su imagen corporativa. • Demandas laborales: Si el empleado puede demandar a la empresa por exceso de jornada laboral. • Fatiga extrema y riesgos de salud: El exceso de trabajo puede generar accidentes, estrés, enfermedades ocupacionales y menor rendimiento, lo que incluso podría derivar en una incapacidad médica.
Claves para cumplir con la normativa • Autorización previa: Ningún trabajador puede realizar horas extras sin aprobación formal. • Límites establecidos: No más de dos horas extras diarias y 12 semanales. • Registro adecuado: Llevar un control de asistencia y tiempos de trabajo es clave para evitar problemas legales. • Pago adecuado: Para el 2025, las horas extras y recargos, nocturnos, dominicales y festivos son las que se indican en la siguiente tabla:
image.png20.28 KBEl valor de las horas extras, nocturnas, dominicales y festivas depende del valor de la hora ordinaria, el cual, a su vez, está determinado por el salario del empleado y el número de horas trabajadas al mes. Para el año 2025, este cálculo cambiará debido a la reducción de la jornada laboral semanal de 46 a 44 horas.
Actualmente, hasta el 15 de julio de 2025, la jornada laboral máxima es de 46 horas semanales. A partir del 16 de julio de 2025, se reducirá a 44 horas semanales, lo que incrementará el valor de la hora ordinaria y, en consecuencia, el valor de las horas extras y demás recargos.
Por ejemplo, considerando un salario fijo de $2.000.000: Con una jornada de 46 horas semanales, el total de horas trabajadas al mes es 230. Este cálculo se obtiene dividiendo 46 entre los días laborables de la semana (6) y multiplicándolo por los 30 días del mes:
(46 / 6) × 30 = 230
Por lo tanto, el valor de la hora ordinaria es: $2.000.000 / 230 = $8.695
Con una jornada de 44 horas semanales, el total de horas trabajadas al mes será 220: (44 / 6) × 30 = 220
En este caso, el valor de la hora ordinaria será: $2.000.000 / 220 = $9.090
Este ajuste tendrá un impacto directo en la liquidación de recargos y horas extras a partir de la fecha mencionada.
Reflexión Final El cumplimiento de la política de horas extras no es solo una obligación legal, sino una práctica que garantiza condiciones laborales justas. Empresas y trabajadores deben asegurarse de respetar las normas para evitar conflictos y fomentar un ambiente de trabajo ético y equitativo. ¡El tiempo extra cuenta, y su correcta administración es clave para el bienestar de todos!