¿Por qué se usa la mediana y no el promedio en los análisis de compensación?
¿Por qué se usa la mediana y no el promedio en los análisis de compensación?
Por Mauricio Jaramillo Montoya
Cuando se analizan datos salariales, es común que se utilice la mediana en lugar del promedio. Aunque ambos son medidas de tendencia, en el contexto de la compensación no significan lo mismo, ni sirven para lo mismo. Aquí te explicamos por qué.
1. El promedio se distorsiona fácilmente El promedio se calcula sumando todos los salarios y dividiendo entre el número total de personas. El problema es que unos pocos salarios muy altos, o muy bajos, pueden subir el promedio, dando una imagen irreal de lo que realmente gana la mayoría.
Ejemplo: Si en una empresa 9 personas ganan entre 2 y 4 millones, y una persona gana 10 millones, el promedio será mucho más alto que lo que gana casi todo el mundo. 2.0M, 2.2M, 2.5M, 3.0M, 3.2M, 3.5M, 3.8M, 5.8M y 10.0M Promedio: 4.0M. Mediana: 3.2M.
2. La mediana representa mejor a la mayoría La mediana es el valor que se encuentra justo en el medio cuando los salarios se ordenan de menor a mayor. Es decir, la mitad de las personas gana menos y la otra mitad gana más. No se ve afectada por extremos altos o bajos.
3. Es más justa para comparar Cuando se usan datos de mercado para construir curvas de compensación, es clave tener una base sólida y realista. La mediana permite hacer comparaciones más equilibradas y consistentes entre cargos, niveles o industrias.
4. Ayuda a detectar dispersiones Si comparamos la mediana y el promedio, y hay una gran diferencia entre ellos, eso puede ser una señal de que hay una alta dispersión en la compensación, o incluso inequidades que deben revisarse.
Usar la mediana en análisis de compensación no es un capricho técnico, es una forma más precisa, responsable y útil de entender cómo se comportan realmente la compensación en una organización o en el mercado. Nos ayuda a tomar mejores decisiones, sin dejarnos engañar por los extremos.